sábado, 28 de febrero de 2009

ALTAS EXPECTATIVAS

Son las 2:51 de la mañana del viernes, y estoy dando vueltas en la cama, para un lado, para el otro, cambio la almohada de lado. No puedo pegar ojo. Mi mujer me pregunta medio dormida que me pasa. Le digo que nada, que algún vecino desconsiderado andaba cantando a las tantas de la noche tras tomarse una copita de más. Es cierto, pero el vecino cantarín no me molestó pues yo ya estaba despierto. Lo que me tiene en vilo es que mañana llega a nuestras costas una marejada de las que hacen época.

Desde hace una semana que la tengo localizada a través del windguru y demas webs meteorológicas, todos los partes coinciden, no hay dudas. Sabiendo lo que viene no puedo parar de imaginar como el ciclón que se formó al otro lado del océano va peinándose y acicalándose para llegar como una reina a mi playa favorita. Un anticiclón que se ha sentado sobre la región significa que los vientos van a ser ligeros y en dirección sur, que por estas tierras es offshore. La predicción es para unas olas de metro y medio, o sea que ni tendré que sacar el tablón a pasear para cazar olas que me llegan al talón, ni hacer de tripas corazón y tirarme a bajar rampas tremendas con un pincho de 7 pies. Cada surfer tiene su tamaño preferido, este es el mío, con olas que te exigen cierta concentración y al mismo tiempo te permiten jugar sobre sus largas secciones y probar distintas maniobras. Además el periodo de 16 segundos significa que las olas traerán consigo la potencia de un swell bien ordenado y a la vez ese tan preciado gran espacio entre series con el que casi no tienes que ni mojarte el pelo para pasar la rompiente.

El rememorar anteriores sesiones con estas características me pone la piel de gallina, días que quedan grabados para siempre en el subconsciente, olas que cogí hace ya años y que las recuerdo como si las hubiera surfeado hace cinco minutos, que ponen una sonrisa en mi cara al pensar en ellas. Emociones muy intensas que yo sólo encuentro en el mar y su energía tan pura.


Esta claro que la anticipación y expectativas que se crean al saber de la llegada de buenas olas, son una parte inseparable de la experiencia del surf y para mi algo que lo hace tan especial. Donde has oído que un jugador de squash o de balonmano no pueda pensar en otra cosa toda la semana porque se dan las condiciones perfectas en su cancha. El surf es diferente, el chequear todos los días las predicciones de modelos de oleaje, vientos, mareas y demás partes meteorológicos son el pan de cada día del surfer dedicado y cuando todos los elementos normalmente caóticos y descoordinados se materializan en forma de olas de belleza insuperable, con un viento fino y offshore, un largo periodo, unos perfectos fondos de arena, un sol radiante, unos buenos amiguetes y tu mejor tabla esperando bajo el brazo. Es entonces cuando uno es recompensado por la madre naturaleza que le trato tan duramente durante tantos días del frío conduciendo durante horas playa tras playa para pillar baños revueltos de guantes, gorro y escarpines de 5 mm. Todo eso se te olvida por completo esos días que surfeas las mejores olas del año.

Y por eso no puedo dormir ... pero si soñar con los ojos abiertos como serán esas olas que vienen mañana y si alguna quedará conmigo tatuada en mi memoria para el resto de mi vida .


¿Qué tal dormis vosotros cuando viene el swell del año?

4 comentarios:

  1. Creo que tengo el placer de hacer el primer comentario en el blog.

    Todavía no he leido todos tus post pero después de leer este creo que repetiré.

    Un saludo,

    ResponderEliminar
  2. Muchas gracias Surf30, es cierto que eres el primero en escribir un comentario!! me ha hecho mucha ilusion, un placer verte por aqui ya que soy un gran fan de tu blog.

    Surflexiones

    ResponderEliminar
  3. Cuando viene un swell asi directamente no duermo jaja , porque la ley de Murphy hace que caiga siempre en fin de semana cuando por mi trabajo me tengo que acostar mas tarde de las cinco , asi que lo que hago es estirar un poco mas la noche y darme un baño a primera hora de la mañana en solitario con las olas soñadas. Luego la siesta es epica tambien.
    Enhorabuena por el blog , esta escrito con ingenio , cosa cada vez mas dificil de encontrar.
    Saludos!!

    Dani

    ResponderEliminar
  4. Gracias Dani,

    Tomare en cuenta tu consejo para evitar el gentio en dias buenos!!!

    Saludos,

    ResponderEliminar