jueves, 31 de diciembre de 2009

RESUMEN DEL 2009

Slater prueba nuevas tablas, Greg Long gana el Eddie Aikau, Mick Fanning el WCT, Parko la Triple Corona y Taj el Pipe Masters.... y?




Pues me parece muy bien pero me da un poco igual si os digo la verdad, ese surf es de otra estratosfera en una galaxia remota a mi "planeta mar Cantábrico". Por mi parte el 2009 a traido bastantes cambios. Pasé de surfear frías olas choppy con viento en Inglaterra a olas en el Cantábrico de mejor calidad, mis primeros baños en Mundaka, buenas sesiones de invierno y otoño en olas cantabras, horario flexible para coger aprovechar las mejores condiciones y también meses de inactividad total en barcos remotos, mi primera experiencia en olas de reef de coral, algunas olas que ya no recuerdo y otras inolvidables... ah sí y también el nacimiento de Surflexiones!!!




Se que este habrá sido un año duro para mucha gente, a ellos les mando ánimos y espero que el año que está apunto de comenzar os trate a todos muy bien. Como dicen los británicos onwards and upwards, hacia delante y arriba, que este 2010 sea todo lo que esperais, y surfísticamente que os encontreis con muchas olas espectaculares por el camino.

lunes, 28 de diciembre de 2009

BUSQUEDA Y CAPTURA


Tras ver la foto de la flagrante saltada recibida por un pobre surfista en Mundaka (pinchar en foto para ampliar) el juez Baltasar Garzón inmediatamente ha emitido una orden de busqueda y captura para encarcelar al desalmado que claramente infringió la primera y más importante ley del código surfístico. Garzón explicó "en mi larga carrera jurídica he visto muchas cosas, he perseguido a malos malísimos como a Pinochet, pero esto clama al cielo... coño, podía haber sido el tubarro de su vida!". La Interpol ya está manos a la obra, aunque se habla de que el sospechoso es un miembro de Al Qaeda que ha buscado refugio en una célula terrorista en Senegal para seguir haciendo de las suyas en las olas africanas.




Para evitar que estos lamentables sucesos se vuelvan a repetir el juez Garzón está barajando una serie de medidas entre las que se incluyen el construir un puesto de guardia permanente en la atalaya custodiado por la policía militar, el colocar un expendedor de tickets flotante en el pico como los de la carnicería y cada surfer cogerá la ola en el orden establecido. Aunque la que más posibilidades tiene es la implantación de un dispositivo electrónico atado al tobillo de cada surfer que entre al agua. El dispositivo pitará si un surfer le salta la ola a otro compañero y soltará una descarga eléctrica al impostor con el voltaje siendo equivalente con la calidad de la ola buitreada. Si la ola robada es un cerrote la descarga será leve (dolor equivalente a un buen tirón de orejas) pero si la ola es de tubazo o el infractor es reincidente el calambrazo será equivalente a chupar los cables de un poste de telégrafo.
gg


ggEl supremo está estudiando en estos momentos también fotos tomadas en El Brusco, Rodiles, La Santa y Pantín. Garzón añadió para terminar "estos crímenes surfísticos los vamos a cortar de raíz, por las buenas o por las malas, antes de que se nos vaya de las manos. Es inadmisible que en pleno siglo XXI estos ladrones de olas anden campando a sus anchas. Ningún "choriza-tubos" quedará impune, el peso de la ley caerá sobre ellos".

sábado, 26 de diciembre de 2009

CALIGULA

Esta manaña estaba pequeñito (tres cuartos de metro) pero muy bonito. Todo iba bien entre los ocho o diez que estabamos en el agua hasta que ha llegado el "zampa olas". Hace mucho tiempo que no veía un espectáculo tan deplorable.

Un "oso" con su tablón azul se ha puesto el primero en el pico y ha cogido sin exagerar el 80-90% de las olas, mientras los allí presentes mirabamos con cara de tonto. Las series eran de una o dos olas únicamente y tardaban unos diez minutos, así que tenía tiempo para remontar y ponerse de nuevo el primero en la cola y es que el gran hijo de la gran chingada ni ha pestañeado, se las ha jamado todas. Para más inri, casi todas las olas rompían con un pico definido con una buena derecha e izquierda y el tipo este remaba la ola cogiéndola sin romper ayudado por su nueve plus pies (pues su surf ere más bien mediocre), hacía un amago para la derecha así que la gente se echaba para atrás y acto seguido cogía y tiraba para la izquierda mientras la derecha rompía ya solitaria.

Ojo, que quede claro por sí acaso que estoy críticando a este personaje por el uso que ha hecho del tablón como arma para aprovecharse y coger más olas, no a la gente que anda con tablón en general, que me parece una alternativa tan respetable como la tabla corta. Y es que también a puteado a otros dos tabloneros que andaban en el pico, pero nadie parecía decirle nada.

La playa es una que suelo entrar poco y que cuenta con bastante historia dentro de las playas cantábricas y muchos "locales" con jerarquía, de los cuales supongo él sería uno porque sino no creo que le dejaran meterse al agua con ese comportamiento. Además a ver quién le decía algo al oso ese de 100 kilitos. Desde luego que el pelotudo este si en una vida pasada fue militar tuvo que ser Hitler, si fue apostol Judas Iscariote y si fue emperador seguro que era el insaciable, caprichoso y despótico Calígula.


Más que el hecho de haberme levantado un sábado a las 6 de la mañana, conducido 100 km de ida y otros tantos de vuelta y haber cogido muy pocas olas (que son cosas que a veces pueden pasar) lo que más mala sangre me ha dado es la falta de consideración del cabrón este (otra cosa no se le puede llamar) para con los demás. Todos somos surfers, todos estabamos ahí chupando frío por algo, todos en algún momento hemos pecado de coger alguna olita de más si los que nos rodeaban tenían menos nivel que nosotros, pero lo de hoy ha sido surrealista, nunca había visto algo igual y eso que he visto muchos "chupópteros", no dejaba pasar ni una. Menos mal que es Navidad! Uno o dos crápulas de estos en cada playa y dejaría el surf ... o me compraba una motosierra (para cortarles la tabla claro)... o un 15 pies para ver quién rie más alto! Por favor ya se que muchos somos unos "devoraos" de esto del surf, pero hay que guardar un poco de dignidad y solidaridad en el pico que si no esto se convierte en un putetxe.


Desearos muchas olas (para todos) en el 2010!

miércoles, 23 de diciembre de 2009

FELIZ NAVIDAD

Hola amigos/as,

Simplemente una breve entrada para felicitaros a todos las navidades. Espero que Papá Noel se porte con vosotros. Yo ya le escrito mi carta (dos trajes de invierno gorditos, cuatro tablas entre 9'1'' y 5'11'', un surfari a Nueva Zelanda y una Wolskwagen nueva). El año pasado pedí una tabla y solo encontré debajo del arból un invento y parafina, así que a ver si pidiendo más ...


En serio, que paseis un buen rato en familia, y mucha felicidad, amor, salud y olas para el 2010!

lunes, 21 de diciembre de 2009

SURF INVERNAL

Esto de vivir en el norte tiene sus pros y sus contras, sus pros son swells del Cantábrico más consistentes y una gran variedad en el tipo de rompientes (de arena a reef, de longboarder a kamikaze, resguardado a "swell magnets"). Lo menos positivo, la masificación en las playas y el frío invernal. Ufff, quién estuviera en Barbate ahora mismo.

Hasta hace diez días la vida era bella, con un otoño muy pero que muy agradable y unos cuantos swells seguidos de grandísima calidad parecía estar en el nirvana... hasta que de sopetón, como una torta en la cara que te despierta llegó el frío, el hielo y la nieve. Llevo casi dos semanas sin entrar al agua gracias en parte al poco mar de los últimos días y sorprendentemente no ando con un "mono surfístico" de los que me subo por las paredes. Ayuda el medio catarro medio proceso gripal que tengo, uno de esos que se quedan de visita más de lo esperado. Y también el frío.



Viviendo a 700 metros sobre el nivel del mar, con una semana sin parar de nevar y alcanzando los -12 grados por las noches, el conducir a las 6 de la madrugada cruzando puertos de montaña con carreteras heladas para llegar a la playa me quita un poco las ganas. Entiendo a los que se van a esquiar o hacer snow estas fechas y aparcan un poco el surf, aunque también opino que si algo te gusta realmente hay que estar a las duras y a las maduras. Tras seis años en Inglaterra surfeando debería estar curado de espanto. Creo que en las Islas Británicas como siempre hace tan malo el proceso de aclimatación es menos chocante. Sólo recordar algunos de esos días grises, con viento gélido, agua que te entra en el traje como una punzada, el dolor de cabeza al hacer el pato, coordinación tras una hora de baño como la de un niño de cuatro años, sacarse el traje a tirones pero que no sale, la ejecución llave-mano-cerradura misión imposible, testículos asustados escondidos entre el matorral porque no se atreven a salir, dedos de los pies insensibilizados, mocos que caen por la cara casi ya azul ...quién dijo que surfear es guay y sexy? Alguno de las Barbados sería, porque del norte de España no creo que fuera, y de Islandia segurísimo que no. Siempre me he preguntado si todavía surfearía si viviese en Alaska o Groenlandia. Me gustaría pensar que sí, pero la respuesta real es que habría que verlo.

También el frío tiene sus cosillas buenas, o por lo menos eso parece por el efecto alivio (como cuando te dejan de estrujar las pelotas), ese gorro de lana, la calefacción del coche, agarrar y no soltar la taza de café o cola-cao cuando está todavía hirviendo, los calcetines gordos de andar por el monte, todo esto se aprecia diez veces más cuando uno sale de un baño invernal.

bb

Mañana espero darme el primer chapuzón de gorrito,chapines y 5/3 después de un largo espejismo estival este otoño, ya os contaré si es para tanto o sólo es un poco de miedo escénico.

viernes, 18 de diciembre de 2009

CAMBIAR EL LOGO

Estoy pensando en cambiar el logo o foto de mi perfil, en estos días sin swell y con más tiempo de ocio libre he pensado que quizás debería reemplazar la foto del viejete con gafas verdes, pues ni soy tan viejo ni demasiado verde tampoco.


No se porqué la cogí realmente, me hizo gracia y me gustaba la idea de camuflarme tras una foto "pseudónima", aunque pensándolo ahora puede que la primera impresión sea al verla "quién es este anciano zumbado?". Debajo las otras fotos que barajé en los 15 minutos que anduve en Google buscando una foto para el perfil del blog (sobre todo la de spiderman), creo que no ayudó que en la casilla de busqueda escribiese "freak".










Creo que ya que el blog es bastante "personal" debería poner algo que sea mío, y como no tengo fotos mías haciendo surf y una de mi careto podría asustar (además no vaya a ser que luego aparezca en google cuando algún listillo le de por teclear "freakies"), así que estoy pensando poner una foto de una serie ordenada que fotografíe hace ya tiempo, parecida a la de la cabecera de surflexiones (la verdad que hace debería llevar más la cámara a la playa).



Creo que haré el cambio de look en día de año nuevo, ya sabéis año nuevo cara nueva. Hasta entonces dejo la entrada abierta por si tenéis alguna otra sugerencia?

lunes, 14 de diciembre de 2009

AUTOS LOCOS

En esto del surf a menos que vivas pegado a la playa y siempre entres ahí, tarde o temprano vas a tener que moverte. De que formas se puede hacer esto es de lo que voy a tratar hoy. Y es que en este deporte hay muchos tipos de transporte, y dentro de cada tipo las gamas van de lo más tirado a super-guachi del paraguay.

Empecemos por los más sencillos, aparte del “coche de San Fernando”. Si vives a una distancia moderada de la playa y eres ecologista, o no quieres gastar en gasolina, o no tienes el carnet de conducir la bici es una buena solución. Eso si, o te preparas un porta-tablas en plan sidecar o más vale que sepas hacer malabarismos con la mochila a la espalda, la tabla en una mano, y la otra para maniobrar si quieres conservar la dentadura intacta. Ayuda si el camino no tiene muchos baches y bordillos, y si has hecho esto desde pequeño y es que son los quinceañeros los que dominan esta disciplina pues van con la tabla debajo del brazo, mientras mensajean con el móvil y van comiendo pipas con la otra. Otra alternativa ecológica si vives en zona urbana es el autobús/tranvía/metro, pero normalmente el conductor/revisor te pone pegas y mira con mala cara así que se suele evitar.


Posiblemente el vehículo más empleado entre surfers es el coche. Aquí es donde la gama y calidad del turismo varía radicalmente. Desde el cuatro latas oxidado sin ventanas y que hay que frenar con la suela del zapato hasta el último modelazo de BMW o Mercedes. Este contraste entre coches es fácil de observar en parkings de playas populares. Dos observaciones, normalmente (pero no siempre) a más caro el coche menos horas en el agua que pasa su dueño (los cochazos cuestan pasta y eso se consigue con trabajos que requieren mayor responsabilidad y muchas horas en la oficina lejos del agua). Segundo, aunque tengas un Rolls Royce o un Seat 600 los dos se va a manchar de arena igual, todavía no se a inventado un coche que evite esto (ni una mujer que no te cante las cuarenta por llenar la alfombrilla de arena!).


Después del coche viene la llamada “furgoneta surfera”, un vehículo multiusos, que te lleva al trabajo entre semana y el finde se convierte en tu casa. También un método muy usado para moverse de surfari, sin tener que preocuparse de donde dormiré esta noche y poder despertar junto a la playa (hay que procurar ser siempre respetuosos y limpios, que luego pagan justos por pecadores). Cuando uno oye que alguien se va con la furgo a coger olas se imagina una Volkswagen California o Merceces Vito último modelo con su conversión Westfalia, pero no todas caen en esta categoría. Hay desde las VW splitscreen del año de la pera, que cabe justo la tabla y una caja de cerillas y vas a 35 km/h de media (en cuesta abajo) hasta las autocaravanas Hymer con ducha, antena televisión, salón, comedor y cuarto de invitados. El que tiene furgoneta ya sea vieja o nueva, sabe que su verdadero valor sale a relucir en esas frías sesiones de invierno cuando te puedes cambiar en seco, con la calefacción a tope y mientras se cuece el café calentito.

Ya cuando nos vamos para más lejos, a ese surfari que uno lleva planeando no se cuantos años, que ha visto diez mil videos en Youtube, y se a releido todas las guías de surf del firmamento, es el avión el que te lleva. A pesar de ser un modo de transporte rápido y cómodo, aquí es donde los surfers sufrimos por partida doble. La primera a la hora de pasar por cajero ya que normalmente las aerolíneas suelen dar unas hostias escalofriantes, para que luego encima te venga un/a borde y te diga que serán 200 euros más por la facturación de las tablas. En segundo lugar por muchas veces que escribas FRAGIL y pongas 20 metros cuadrados de espumillón entre cada tabla nunca respiras tranquilo hasta que las revisas en tierra y ves que están sanas y salvas. Siempre uno tiene pesadillas la noche antes de partir con algún operario de equipaje de dos metros quince analfabestia completo que tira tus tablas favoritas sin escrúpulos debajo de 500 kilos de equipaje. Aquí de nuevo se puede viajar desde en primera clase con champan y caviar tumbado a todo lujo o en avioneta tipo Indiana Jones con gallinas, conejos y de pies agarrándote a lo que puedas.

Y luego ya quedan los medios de transporte menos usuales. El helicóptero, que mejor casi ni verlo porque suele utilizarse por la Cruz Roja para rescatar a algún kamikaze que se mete en situaciones extremas o simplemente un despistado que se lo lleva la corriente. O el barco, también usado frecuentemente en surfaris, bien como ferries para moverse entre islas o boat-trip que te deja a pie de ola sin mojarte el pelo (ahí el factor cocinero y como le huelan los pies al compañero de camarote es crítico) .

Así que ya veis, seguro que me dejo un montón de tipos de transporte (burro, motocicleta, submarino! …), lo que está claro que los surfers nos montamos en cualquier cosa con tal de llegar hasta nuestras tan deseadas olas.

domingo, 13 de diciembre de 2009

LA CABEZA COMO UN BOMBO

Vaya fin de semanita, menos mal que he vuelto al trabajo, pensé que nunca diría esto. Dos días que se me han hecho más largos que un mes. Fuí a pasar el fin de semana con mis suegros y sobrinos en su pueblo (lejos del mar) con la sana intención de hacer vida familiar, pero con el frío y la lluvia hemos acabado encajonados 48 horas en el txoko (o salón con chimenea) y sin escape.

Ha coincidido que la hija andaba la pobre con fiebre y no dejaba de llorar, el sobrinillo hiperactivo no paraba de hacer putadillas, los suegros andaban como el perro y el gato y yo ahí pensando como un alcohólico anela un vaso de whisky o un fumador echarse un cigarrillo, lo que daría aunque sea por media hora de surf para desenchufar y volver a la cordura.



A veces oyes hablar de las "viudas del surf", de cuantos matrimonios a descuajeringado nuestra obsesión desvocada por las olas. Pero alguna vez os habéis preguntado cuantas relaciones de pareja ha salvado? Cuantos malos rollos por el currelo, roces entre amigos o movidas por la suegra se han quedado en el agua y no se los ha tenido que merendar la pareja en casa? Ahí dejo la pregunta.

miércoles, 9 de diciembre de 2009

MI MINI WAIMEA

A las 11 y algo me he metido en una ola de playa semi-expuesta, estimando que los 2 metros del windguru producirían olas de alrededor de 1.5 metros allí. Al llegar al parking y viendo que no había viento y se oían las olas rugir y atisvaba algún coche aparcado con la funda de la tabla vacía, me he puesto el traje directamente sin ojear las condiciones, así ahorrándome el habitual paseo hasta las dunas ya que llegaba tarde y se me iba a pasar el punto de marea.

Al subir las dunas con tabla en mano, se veía el mar hiperglassy y bastante en calma. Los dos surfistas en el agua estaban lejísimos, normalmente el pico suele estar bastante más cerca de la playa. A donde van estos flipaos, he pensado. Eso es hasta que he visto la serie llegar al empezar a entrar al agua, Dios mío que era eso parecía un mini Puerto Escondido. El surfista que cogío la primera ola o era un pigmeo o esa ola era muy grande (para mi modesto surf claro).

Tras remontar la primera serie, vino la segunda casi llegando al pico, más grande aún, cuanta agua lleva eso madre mía, lo que había visto antes claramente no era un espejismo. Pasé la primera ola por los pelos, la segunda levantaba rápidamente y yo remando como un condenado. Me caza o no me caza? Iba ha andar muy justa la cosa. La última brazada, ya pensaba que libraba cuando metía la punta para hacer la cuchara ya dentro de las tripas de la ola. Iluso soy. El tubo me ha succionado hacia atrás con un efecto back-flip con incrustación con mi propia tabla en la pierna derecha moratón incluido (la primera vez que me sale ese truco en olas de esa magnitud) y consiguiente centrifugado de las posteriores dos olas de la serie. Empieza bien la cosa.

Menos mal que ayer ví un par de rondas del Eddie Aikau, y si Andy Irons no se mata en una orillera cerrote brutal de 10 pies, entonces esto no puede ser tan malo. La verdad, es que salvando las gigantestas distancias, hoy me ha recordado mucho a las imágenes que ví ayer en el Eddie. Un mar glassy y ordenado, con un swell grande que llegaba en series que tardaban pero cuando aparecían se veían amontonarse en el horizonte. Yo había ido a surfear el swell de 2 metros pero lo que allí empezaba a filtrar era el maretón de esta tarde de 4 metros y periodo 16. Gracias al viento offshore y el alto periodo olas de esta magnitud que normalmente serían completos cerrotes en esa playa dejaba que algunas de ellas enfocarán su punto de mayor fuerza sobre unos fondos bien puestos para generar unos picos espectaculares a la vez que aterradores.

Como en el Eddie he salido con un total de cuatro olas y unos cuantos wipeouts de primera calidad. En particular he cogido una izquierda de esas que no se olvidan. Sabéis cuando os viene un olón con una forma de pico triangular de foto y estáis en ese lugar perfecto donde hay que esperar un poco a la ola para que levante del todo y entonces remar a todo gas para que te lleve? Ha sido uno de los takeoffs más verticales que jamás haya hecho, necesitando de todas las quillas y el canto para no salir catapultado mientras la ola levantaba a gran velocidad. La pared se a puesto completamente vertical y mirando hacia arriba sin estar siquiera flexionado veía como la ola empezaba a doblarse sobre ella misma, pero yo iba tan acelerado que he pasado esa sección a toda pastilla (algún surfer con mayor experiencia creo podría haber sacado un buen tubo de ahí) y he continuado por la larguísima ola hasta que finalmente ha cerrado. Aunque ya sé que para los hawaianos de Waimea esta ola hubiese sido una basurilla por la que ni se mojarían el pelo, en mi "mini-Eddie" salí de ella como si hubiese conseguido un 100!

Sintiendo hoy a partes iguales tanto miedo y felicidad a la vez es una sensación extraña. Si yo me siento así en olas de poca monta que pasará por la cabeza de los participantes del Eddie donde se juegan la vida? Esa gente está hecha de otra pasta y es increible que tengan la valentía (o locura) de coger esa bestialidad de olas. Ayer durante la retransmisión Fred Patachaia decía que Greg Long no se atrevía a entrar en Sunset la primera vez que fue allá con él, contaba como se puso atrás del todo, esperó una hora y media para coger una ola que resultó ser la bomba del día y de ahí en adelante se "enganchó" a las olas grandes. Quizás esa "bomba" de ola que he cogido hoy sea el principio de algo nuevo ... Axi e Ibon preparaos que voy, gerónimoooo!!!! ;-)


martes, 8 de diciembre de 2009

SEQUIA BLOGERA

Hola amigos,

Acabo de darme el último baño del puente, buenas olas y masas de gente, es lo que hay en días festivos cuando sólo funcionan ciertos spots. Ayer y hoy hacía falta en el agua semáforo y guardia municipal. Una ola y cinco tíos saltando a la vez ha sido lo normal, choques de tablas y cabezas, menos mal que no de puños. En estos días me dan ganas de quedarme en casa, pero ¿quién es el guapo que le dice no a metro y medio de tiralíneas? Yo no (...de momento).

Bueno a lo que iba, últimamente he dejado el blog un poco desatendido, lo siento. Pero es que cuando hay olas sin parar es lo que tiene, en mi jeraquía de valores la acción de surfear está por encima de la de blogear. Mi excusa, que estas numerosas sesiones de invierno son en realidad una ardua tarea de investigación y recopilación de material para el blog, mi método para buscar inspiración! Intentando compaginar familia, trabajo y surf me queda poco tiempo para la meditación.

Creo que no soy el único que hace un paroncillo esos días que se pueden aprovechar surfeando en vez de delante del ordenador. Además de blogero activo también soy lector y fan de blogs surferos de otra gente y he notado que cuando llega el fin de semana y aparece la oportunidad de entrar al agua son pocos los que publican entradas en esas fechas. Hay un parón surf-blogero casi total. Ojeas los blogs y la última entrada que aparece es la del viernes casi sistemáticamente. Es lógico, nos gusta escribir sobre surf pero sobre todo vivirlo, en directo, desde el agua. Quizás la solución sea llevarse un portátil impermeabilizado al pico para escribir entre series!

Para enmendar un poco mi irregularidad en cuanto a publicación de entradas intentaré a partir de ahora escribir al menos una cada lunes (a la noche) y si me llega la inspiración alguna extra. Salud y buenas olas.

miércoles, 2 de diciembre de 2009

QUEMADO

A veces me pregunto si algún día se me pasará esta fiebre del surf. Si un futuro miraré atrás y me diré porque pasabas tantas horas mirando los partes, conduciendo, sacrificando muchas cosas para pasar frío en alguna playa del norte. En definitiva si acabaré quedamo. Todavía no me ha pasado, y dudo que me ocurra, pero no se puede decir de este agua no beberé.

Aquí va la historia de mi amigo John, un surfista compulsivo. Incluso el día que le conocí, justo después de hacer una entrevista en el sitio donde yo trabajaba, sin conocerlo de nada (y sin saber que yo surfeaba) sacó el tema a los 30 segundos de conversación. Consiguió el trabajo, y durante dos años ibamos todos los fines de semana a surfear juntos, el llevavá ya surfeando siete temporadas, yo dos. El tío tenía un porrón de videos de surf en los que se sabía los giros de cada sección de memoria, si yo miraba el windguru dos veces al día él lo hacía cinco, si yo me daba un baño de dos horas y media en pleno invierno británico el estaba tres y pico, y cuando yo me iba de vacaciones a la península para ver familia y amigos el se iba de surfari a Irlanda. Siempre hablaba de su amigo Jim, un tipo que vendío su casa y posesiones materiales y llevaba media decada viajando por todo el mundo en busca del mejor surf y como le gustaría seguir sus pasos. También me contaba como durante su carrera universitaria en el noreste de Inglaterra pertenecía al club de surf donde él y otro colega viajaban seis horas de ida y otras tantas de vuelta para coger sesiones de olas en un mar color marrón congelado rompiendo sobre roca afilada. Yo al lado suyo parecía un "frigido" del surf y eso que soy un "salido" en esta materia.

A los dos años de conocerle yo me fuí a trabajar y a vivir a otro lado, pero seguía estando a menos de una hora de John. Todavía quedabamos muchos fines de semana, pero ya no todos. Pasaron seis meses y cada vez oía menos de él y a los mensajes que le mandaba de "este fin de semana va ha estar bien, quedamos?" le seguía un "no puedo porque tengo tal o cúal". Llegó un momento en el que me mosqueé pensando que el tío ya pasaba olímpicamente de mi pero un día quedamos para aclarar las cosas y me lo dijo claramente. "Es que he perdido esa pasión que sentía por el surf, soy así, me obsesiono con temas y luego al cabo de cierto tiempo me quemo y lo dejo". Me explicó como durante su adolescencia era un obseso de la mountain bike y que llegó a ser número 5 de toda Inglaterra corriendo para el equipo nacional, pero un día se aburrió de ello y nunca más volvió a coger la bici. Lo mismo le paso con el surf. Con el tiempo y la distancia nuestra relación se fue enfriando. La última vez que oí hablar de él andaba completamente entregado a la ciencia, se fue a vivir a Florida para trabajar en un instituto de investigación. Quién sabe cual será su próxima fijación, el violín. el aikido, el spinning?
En mi caso hasta que llegó el surf a mi vida había tenido aficiones pero no obsesiones, actividades que me gustaban pero no me consumían. El surf llegó para llenar un "vacío" que estaba ahí esperando a llenarse, y vaya que si lo llenó, hasta inundarme. Fue una vocación esperando ser descubierta, no tuve la suerte de nacer delante de una playa con unos padres que surfearan, la vida quiso que entrase en esto del surf un poco rezagado y quizás por ello ahora intento aprovechar hasta la última ola por esas sesiones perdidas. Suelen decir que los que empezamos en el surf algo tarde somos los peores, los más absorbidos por el tema y creo que es cierto. Así que aunque no descarte futuros hobbies, ya que a uno le gusta aprender y disfrutar de muchos aspectos de la vida, el surf creo quedará siempre estancado en el epicentro como rey, con prioridad vitalicia o al menos hasta que las articulaciones y ligamentos digan dedicate a la poesía o a la meditación que el body no está para más sartenazos en el agua.

martes, 1 de diciembre de 2009

¿CUANTO HABIA HOY?

Esa es la primera pregunta que me hace mi amigo por el móvil cuando me pide el parte a pie de playa. Para mí esta es una pregunta comprometida e importante ya que de ello depende de si tu colega se va ha hacer la kilometrada para ir hasta allá. No se vosotros pero a mí se me hace difícil contestarla. A veces porque si no te has metido todavía, juzgar el tamaño exacto de la mar desde tierra, sobre todo si la ola rompe lejos y no hay nadie en el agua, es harto difícil. Otras veces como hoy, me he metido en una playa donde la mayor parte de las series rompían sobre el metro con un mar decreciente, pero un tercio de las series venían de casí dos metros ¿Qué digo entonces?

¿Cuánto hay en la foto un cuarto de metro en la orilla o 8 pies de órdago?

Tampoco quieres quedar como un exagerado en esos días de mar cuando hay claramente dos metros, pero como parece casi tabú decir ese tamaño y no sea que para cuando lleguen al parking el mar haya bajado o ha sido alguna serie excepcional la que has visto, pues dices que hay metro y medio o igual un pelín más. En mi opinión lo mejor es contarles lo que tu juzgas por tu experiencia y si acaso tirar un poco a la baja. Si dices que hay tres cuartos de metro y al llegar ven un metro justito les va a parecer oro puro, sin embargo si les dices que hay metro y medio cuando hay un metro pelado les dará un bajón.

Y es que cada uno vemos las mismas olas de forma diferente. Por un lado están los que van de "hawaianos" midiendo la ola por detrás, contándote que había un metro cuando en realidad había dos metros y pico, y eso tampoco es, pués te puede dar un ataque el día que te dicen que hay un metro y medio glassy, vas todo embalado a la playa y te encuentras con un "Waimea" y los huevos de corbata. Por otra parte están los flipaos. El otro día mientras me cambiaba tras un buen baño, un jovenzuelo que asumí (quizás erroneamente) era algo novato charlaba con su amigo diciendo "vaya olazas de 3 metrazos tío, flipas!" cuando en realidad no había eso ni de coña pues sino me hubiese quedado en tierra, las series más grandes eran de dos metros a lo sumo.

Y es que hay preguntas que afectan a lo más profundo de nuestro ego masculino como ¿Cuánto puedes levantar de press de banca?, ¿Cuántos polvos has echado en una noche?, y ¿Cuánto medían las olas que has cogido hoy? donde nuestro instinto natural de "macho ibérico" nos traiciona.